lunes, diciembre 25, 2006

Aniversario

El 25 de diciembre de 1977 fallecía en suiza Charles Spencer Chaplin. Mas que conmemorar su muerte, esto es mas bien recordar su obra en una fecha importante de su vida. El texto que expongo es el discurso que dice su personaje en el final de El gran dictador. Que lo disfruten.

"Lo siento, pero no quiero ser emperador. No es lo mío. No quiero gobernar o conquistar a nadie. Me gustaría ayudar a todo el mundo --si fuera posible--: a judíos, gentiles, negros, blancos. Todos nosotros queremos ayudarnos mutuamente. Los seres humanos somos así. Queremos vivir para la felicidad y no para la miseria ajena. No queremos odiarnos y despreciarnos mutuamente. En este mundo hay sitio para todos. Y la buena tierra es rica y puede proveer a todos. El camino de la vida puede ser libre y bello; pero hemos perdido el camino. La avaricia ha envenenado las almas de los hombres, ha levantado en el mundo barricadas de odio, nos ha llevado al paso de la oca a la miseria y a la matanza. Hemos aumentado la velocidad. Pero nos hemos encerrado nosotros mismos dentro de ella. La maquinaria, que proporciona abundancia, nos ha dejado en la indigencia. Nuestra ciencia nos ha hecho cínicos; nuestra inteligencia, duros y faltos de sentimientos. Pensamos demasiado y sentimos demasiado poco. Más que maquinaria, necesitamos humanidad. Más que inteligencia, necesitamos amabilidad y cortesía. Sin estas cualidades, la vida será violenta y todo se perderá. El avión y la radio nos han aproximado más. La verdadera naturaleza de estos adelantos clama por la bondad en el hombre, clama por la fraternidad universal, por la unidad de todos nosotros. Incluso ahora, mi voz está llegando a millones de seres de todo el mundo, a millones de hombres, mujeres y niños desesperados, víctimas de un sistema que tortura a los hombres y encarcela a las personas inocentes. A aquellos que puedan oírme, les digo: \"No desesperéis\". La desgracia que nos ha caído encima no es más que el paso de la avaricia, la amargura de los hombres, que temen el camino del progreso humano. El odio de los hombres pasará, y los dictadores morirán, y el poder que arrebataron al pueblo volverá al pueblo. Y mientras los hombres mueren, la libertad no perecerá jamás. ¡ Soldados! ¡ No os entreguéis a esos bestias, que os desprecian, que os esclavizan, que gobiernan vuestras vidas; decidles lo que hay que hacer, lo que hay que pensar y lo que hay que sentir ! Que os obligan ha hacer la instrucción, que os tienen a media ración, que os tratan como a ganado y os utilizan como carne de cañón. ¡ No os entreguéis a esos hombres desnaturalizados, a esos hombres-máquina con inteligencia y corazones de máquina ! ¡ Vosotros no sois máquinas ! ¡ Sois hombres ! ¡ Con el amor de la humanidad en vuestros corazones ! ¡ No odiéis ! ¡ Sólo aquellos que no son amados odian, los que no son amados y los desnaturalizados ! ¡ Soldados ! ¡ No luchéis por la esclavitud ! ¡ Luchad por la libertad ! En el capítulo diecisiete de san Lucas está escrito que el reino de Dios se halla dentro del hombre, ¡ no de un hombre o de un grupo de hombres, sino de todos los hombres ! ¡ En vosotros ! Vosotros, el pueblo tenéis el poder, el poder de crear máquinas. ¡ El poder de crear felicidad ! Vosotros, el pueblo, tenéis el poder de hacer que esta vida sea libre y bella, de hacer de esta vida una maravillosa aventura. Por tanto, en nombre de la democracia, empleemos ese poder, unámonos todos. Lucharemos por un mundo nuevo, por un mundo digno, que dará a los hombres la posibilidad de trabajar, que dará a la juventud un futuro y a los ancianos seguridad. Prometiéndoos todo esto, las bestias han subido al poder. ¡ Pero mienten ! No han cumplido esa promesa. ¡ No la cumplirán ! Los dictadores se dan libertad a sí mismos, pero esclavizan al pueblo. Ahora, unámonos para liberar el mundo, para terminar con las barreras nacionales, para terminar con la codicia, con el odio y con la intolerancia. Luchemos por un mundo de la razón, un mundo en el que la ciencia y el progreso lleven la felicidad a todos nosotros. ¡ Soldados, en nombre de la democracia, unámonos ! Hannah, ¿puedes oírme? ¡ Dondequiera que estés, alza los ojos! ¡ Mira, Hannah! ¡ Las nubes están desapareciendo! ¡ El sol se está abriendo paso a través de ellas! ¡ Estamos saliendo de la oscuridad y penetrando en la luz! ¡ Estamos entrando en un mundo nuevo, un mundo más amable, donde los hombres se elevarán sobre su avaricia, su odio y su brutalidad! ¡ Mira, Hannah! ¡ Han dado alas al alma del hombre y, por fin, empieza a volar! ¡ Vuela hacia el arco iris, hacia la luz de la esperanza! ¡ Alza los ojos, Hannah! ¡ Alza los ojos!". 

sábado, diciembre 23, 2006

Misterios de Castelar

Bajo este título voy a notariar los inexplicables misterios que suceden en esta pequeña Ciudad. De la misma forma, tambien figurarán en este post, si alguno de estos misterios se llegara a resolver de alguna manera. 

El misterio de la luz del altillo de la casa de Pergamino al 1400.

Hay en el altillo de esta casa (aunque quizá sea un pequeño segundo piso) una ventana que da a 
una habitacion la cual tiene una luz que nunca se apaga. He pasado a todos los horarios: día, tarde,
noche, altas horas de la madrugada. Jamás se apaga. Nunca. En verano, cuando dejan la ventana
abierta, por entre las cortinas se pueden ver las paredes con bibliotecas repletas de pilas y pilas de papeles. Hasta ahora no se ha encontrado explicacion a la iluminacion perpetua de esta habitacion.

Serán valoradas todo tipo de conjeturas.

domingo, diciembre 17, 2006

The table ballet

 Hoy pongo un fragmento muy conocido, especialmente por cierto capítulo de Los Simpsons, de una película de Charles Spencer Chaplin o Charlie Chaplin, o Charlot. Él es mi heroe cinematográfico al cual pienso dedicarle un post no muy lejano. 
Espero que disfruten este fragmento. Gracias.

miércoles, diciembre 13, 2006

Datos del ferrocarril Sarmiento

Los siguientes son datos relevados por la consultora C&T durante los meses de septiembre
 y octubre del corriente año.

El tipo de viajante se divide en: 42% mujeres, 46% hombres, 1,2% travestis, 0,5% indefinido y 0,3% perros.
El 75%  de las mujeres menores de 35 años que bajan en la estacion Ramos Mejía son de Lindas a Muy lindas.
El 43,1% de las mujeres que bajan en Castelar  son estudiantes o secretarias (o ámbas).
El 37% de los pasajeros se ponen a boludear con el celular en algún momento del viaje.
6,3 es el promedio de celulares robados en un día.
Existen hasta 13 vendedores ambulantes que pueden ofrecer productos muy diversos como: alfajores triples, enhebradores de agujas o chips prepagos para celular.

Estos son solo algunos datos de un informe más extenso que me facilitó César Markusevich, consultor de C&T y amigo personal.


lunes, noviembre 27, 2006

Yoda tiene razón

Do or do not, there is no try 
(Hazlo o no lo hagas, intentar no sirve)

                                                   -Yoda

Intentar sin saber por qué o cómo uno cree que va a hacer algo es inútil. Si uno no tiene plena confianza en las propias capacidades, intentar no sirve. Los que lo hacen
 a pesar de todo son los valientes. A mi parecer, la valentía está sobrevalorada.
El tipo valiente no tiene amor propio y mucho menos puede tenerlo por los demás.

miércoles, noviembre 22, 2006

Antes de morir

Cosas que haré irremediablemente antes de morir:

Un cineclub
Un festival de cortometrajes
Un programa de radio
Un largometraje
Recorrer toda la Argentina
Viajar a New York, París, Atenas, San Petersburgo y Moscú.
Abrir una escuela de arte.


Hasta ahora es eso, la lista se irá alargando o acortando a medida que cumpla o agregue metas.

viernes, septiembre 29, 2006

Panfleto de Jonathan Swift

Este es un texto del cual alguna vez Dolina leyó unos fragmentos en su programa y yo me de diqué freneticamente a buscarlo en internet y lo encontré. Me encanta, y por eso lo resumí para compartirlo con ustedes. Es una sátira genial.

Una modesta proposición:
Para prevenir que los niños de los pobres de Irlanda sean una
carga para sus padres o el país, y para hacerlos útiles al público
[Sátira: Resumida por mí]

Jonathan Swift

Es un asunto melancólico para quienes pasean por esta gran ciudad o viajan por el campo, ver las calles, los caminos y las puertas de las cabañas atestados de mendigos del sexo femenino, seguidos de tres, cuatro o seis niños, todos en harapos e importunando a cada viajero por una limosna. Esas madres, en vez de hallarse en condiciones de trabajar para ganarse la vida honestamente, se ven obligadas a perder su tiempo en la vagancia, mendigando el sustento de sus desvalidos infantes: quienes, apenas crecen, se hacen ladrones por falta de trabajo, o abandonan su querido país natal para luchar por el Pretendiente en España, o se venden a sí mismos en las Barbados

Por mi parte, habiendo volcado mis pensamientos durante muchos años sobre este importante asunto, y sopesado maduradamente los diversos planes de otros proyectistas, siempre los he encontrado groseramente equivocados en su cálculo. Es cierto que un niño recién nacido puede ser mantenido durante un año solar por la leche materna y poco alimento más; a lo sumo por un valor no mayor de dos chelines o su equivalente en mendrugos, que la madre puede conseguir ciertamente mediante su legítima ocupación de mendigar. Y es exactamente al año de edad que yo propongo que nos ocupemos de ellos de manera tal que en lugar de constituir una carga para sus padres o la parroquia, o de carecer de comida y vestido por el resto de sus vidas, contribuirán por el contrario a la alimentación, y en parte a la vestimenta, de muchos miles. 

Hay además otra gran ventaja en mi plan, que evitará esos abortos voluntarios y esa práctica horrenda, ¡cielos!, ¡demasiado frecuente entre nosotros!, de mujeres que asesinan a sus hijos bastardos, sacrificando a los pobres bebés inocentes, no sé si más por evitar los gastos que la vergüenza, lo cual arrancaría las lágrimas y la piedad del pecho más salvaje e inhumano.

El número de almas en este reino se estima usualmente en un millón y medio, de éstas calculo que puede haber aproximadamente doscientas mil parejas cuyas mujeres son fecundas; de ese número resto treinta mil parejas capaces de mantener a sus hijos, aunque entiendo que puede no haber tantas bajo las actuales angustias del reino; pero suponiéndolo así, quedarán ciento setenta mil parideras. Resto nuevamente cincuenta mil por las mujeres que abortan, o cuyos hijos mueren por accidente o enfermedad antes de cumplir el año. Quedan sólo ciento veinte mil hijos de padres pobres nacidos anualmente: la cuestión es entonces, cómo se educará y sostendrá a esta cantidad, lo cual, como ya he dicho, es completamente imposible, en el actual estado de cosas, mediante los métodos hasta ahora propuestos.(...)

Propondré ahora por lo tanto humildemente mis propias reflexiones, que espero no se prestarán a la menor objeción.

Me ha asegurado un americano muy entendido que conozco en Londres, que un tierno niño sano y bien criado constituye al año de edad el alimento más delicioso, nutritivo y saludable, ya sea estofado, asado, al horno o hervido; y no dudo que servirá igualmente en un fricasé o un ragout.

Ofrezco por lo tanto humildemente a la consideración del público que de los ciento veinte mil niños ya calculados, veinte mil se reserven para la reproducción, de los cuales sólo una cuarta parte serán machos; lo que es más de lo que permitimos a las ovejas, las vacas y los puercos; y mi razón es que esos niños raramente son frutos del matrimonio, una circunstancia no muy estimada por nuestros salvajes, en consecuencia un macho será suficiente para servir a cuatro hembras. De manera que los cien mil restantes pueden, al año de edad, ser ofrecidos en venta a las personas de calidad y fortuna del reino; aconsejando siempre a las madres que los amamanten copiosamente durante el último mes, a fin de ponerlos regordetes y mantecosos para una buena mesa. Un niño llenará dos fuentes en una comida para los amigos; y cuando la familia cene sola, el cuarto delantero o trasero constituirá un plato razonable, y sazonado con un poco de pimienta o de sal después de hervirlo resultará muy bueno hasta el cuarto día, especialmente en invierno.

Ya he calculado el costo de crianza de un hijo de mendigo (entre los que incluyo a todos los cabañeros, a los jornaleros y a cuatro quintos de los campesinos) en unos dos chelines por año, harapos incluidos; y creo que ningún caballero se quejaría de pagar diez chelines por el cuerpo de un buen niño gordo, del cual, como he dicho, sacará cuatro fuentes de excelente carne nutritiva cuando sólo tenga a algún amigo o a su propia familia a comer con él. De este modo, el hacendado aprenderá a ser un buen terrateniente y se hará popular entre los arrendatarios; y la madre tendrá ocho chelines de ganancia limpia y quedará en condiciones de trabajar hasta que produzca otro niño.

Quienes sean más ahorrativos (como debo confesar que requieren los tiempos) pueden desollar el cuerpo; con la piel, artificiosamente preparada, se podrán hacer admirables guantes para damas y botas de verano para caballeros elegantes.

Suponiendo que mil familias de esta ciudad serían compradoras habituales de carne de niño, además de otras que la comerían en celebraciones, especialmente casamientos y bautismos: calculo que en Dublín se colocarían anualmente cerca de veinte mil cuerpos, y en el resto del reino (donde probablemente se venderán algo más barato) las restantes ochenta mil.(...)

No se me ocurre ningún reparo que pueda oponerse razonablemente contra esta proposición, a menos que se aduzca que la población del Reino se vería muy disminuida. Esto lo reconozco francamente, y fue de hecho mi principal motivo para ofrecerla al mundo. Deseo que el lector observe que he calculado mi remedio para este único y particular Reino de Irlanda, y no para cualquier otro que haya existido, exista o pueda existir sobre la tierra. Por consiguiente, que ningún hombre me hable de otros expedientes: de crear impuestos para nuestros desocupados a cinco chelines por libra; de no usar ropas ni mobiliario que no sean producidos por nosotros; de rechazar completamente los materiales e instrumentos que fomenten el lujo exótico; de curar el derroche de engreimiento, vanidad, holgazanería y juego en nuestras mujeres; de introducir una vena de parsimonia, prudencia y templanza; de aprender a amar a nuestro país, en lo cual nos diferenciamos hasta de los lapones y los habitantes de Tupinambú; de abandonar nuestras animosidades y facciones, de no actuar más como los judíos, que se mataban entre ellos mientras su ciudad era tomada; de cuidarnos un poco de no vender nuestro país y nuestra conciencia por nada; de enseñar a los terratenientes a tener aunque sea un punto de compasión de sus arrendatarios. De imponer, en fin, un espíritu de honestidad, industria y cuidado en nuestros comerciantes, quienes, si hoy tomáramos la decisión de no comprar otras mercancías que las nacionales, inmediatamente se unirían para trampearnos en el precio, la medida y la calidad, y a quienes por mucho que se insistiera no se les podría arrancar una sola oferta de comercio honrado.(...)

Declaro, con toda la sinceridad de mi corazón, que no tengo el menor interés personal en esforzarme por promover esta obra necesaria, y que no me impulsa otro motivo que el bien público de mi patria, desarrollando nuestro comercio, cuidando de los niños, aliviando al pobre y dando algún placer al rico. No tengo hijos por los que pueda proponerme obtener un solo penique; el más joven tiene nueve años, y mi mujer ya no es fecunda.


lunes, septiembre 25, 2006

Mirando al cielo

Estas fotos fueron sacadas al cumplirse un mes de los incidentes en la estacion de Haedo. El mismo día los vecinos de la estacion hicieron una muestra con fotos, poemas y demás obras plásticas hechas por ellos mismos acerca de la estación y de lo sucedido. Recuerdo que fue bastante triste ver a la estacion así, ni los arboles se salvaron.







 

domingo, agosto 27, 2006

Pasó mucho tiempo sin publicar nada nuevo. Ya me cansé de improvisar cada vez que me obligo a escribir una entrada nueva. No quier hacerlo, me niego. Así es que voy a entregarme a la corriente de blogs que ponen fotos y les mostraré una foto de mi autoría.



Foto tomada en algun momento del verano pasado, fue una tormenta increíble de la cual tambien tengo algunos rayos grabados. Las nubes en el cielo pasaron de un violeta oscuro a ese gris siniestro de una manera inexplicable. Lástima que no la pude poner mas grande. La próxima pondré algunas fotos de la estacion de Haedo post destrucción.

Demian Rostov

jueves, julio 13, 2006

¡Jefe! ¿Me da un emujoncito?

Y eso es lo que voy a hacer. La última vez que encontré al zátrapa de Elias Vicente, hace unos 8 meses, me contó que estaba por empezar a filmar un cortometraje como fin de clases del taller al que asiste. Estaba muy nervioso y abrazando papeles sueltos que se le caían constantemente y él los juntaba una y otra vez. Intercambiamos unas palabras y se fue corriento a un casting de actores (según me dijo). No lo volví a ver, pero hace dos días recibí un correo suyo pidiendome encarecidamente que le ayude a promocionar su cortometraje, que no lo mostraba en concursos porque no cree en que le deban dar un premio por el arte que el busca y que quiere hacerce conocer "de boca a boca". Es así como decidí hacer un post con el video que realizó, cuyo contenido desconozco y pienso seguir en desconociendo, por lo cual no me resposabilizo por el mismo. Desde ya, muchas gracias.

Demian Rostov



viernes, junio 23, 2006

La vida se divide entre lo horrible y lo miserable

Deacuerdo a unos acontecimientos ocurridos recientemente en la estacion Callao del Subte B, recordé este viejo cuento que tenía guardado por ahí y que está inspirado por una historia similar a la que estuvo dando vueltas por las noticias en estos últimos días. Ojalá les guste y lo disfruten.


Era una hermosa noche

por Demian Rostov

Una taza de café volcada sobre la mesa con unos dedos que apenas la aprietan y manchas de sangre oscurecidas por el café derramado. La sangre es de Vera, la chica del 4to B que había soñado con vivir una existencia feliz e imperturbable. Víctima del Bovarismo, se encerró en sus propias conclusiones y, como Emma, no pudo con el mundo real. Decidió dejar de ser, de existir, antes de aceptar la triste verdad: La realidad no le sirve a los soñadores, y como a Vera, les es nocivo.
El mundo real es demasiado absurdo y cruel para las espíritus sensibles como Vera, entonces se recluyen al arte, en donde pueden moldear la realidad a su gusto. La expresión artística es siempre superior a la realidad que crean las sociedades; es el orden a partir del desorden, y es perfecto.
Vera no supo diferenciar esta realidad y pronto se vio perdida entre dos mundos aparentemente iguales. Por eso creyó que viviría aventuras excitantes constantemente, que sentiría amores intensos y desengaños de una tristeza absoluta, penso, además, que nada interrumpiría jamas la vida perfecta que deseaba.
Y eso estuvo bien por un tiempo. Pero todo se arruino un día que salió a pasear bajo la noche estrellada más hermosa y agradable que hubiera visto jamas. Caminó y caminó, contenta y feliz mirando al cielo. Como estaba en la ciudad y había muchas luces prendidas que no le dejaban apreciar bien las estrellas, tuvo la ocurrencia de ir hasta una plaza alejada, al lado de las vías del ferrocarril, en donde nunca se encendían las luces, de manera que, por las noches, quedaba todo en penumbra. Una vez hubo llegado a la plaza, se tendió en el pasto tan delicada como una mariposa. En su cara se dibujaba una enorme sonrisa que apenas representaba la felicidad que la había invadido esa noche, y como regalos que le hacia a la luna en creciente, soltaba cada tanto una frágil e inocente risita que enamoraría a cualquier hombre sensible, con solo escucharla una vez. Unos momentos después, lo fatal que iba a pasar, paso. Vera escucho un ruido que provenía de unos arbustos y pregunto con su voz de musa: ¿Quién esta ahí? Nadie respondió, penso que habría sido algún animal. Unos segundos después una perversa mano le tapo la boca fuertemente desde atrás, y la arrastro hasta abajo de un árbol cuyas ramas caídas llegaban hasta el suelo formando una especie de bóveda. La intolerancia, la brutalidad y la maldad desmedida del mundo estuvieron representadas por esa mano, en esa presencia demoniaca que arrebato a Vera de su mundo ideal. El demonio no tardo en golpearla y despojarla de su ropa para quitarle lo que todavía le quedaba de pura, para rebajarla al ultimo de los escalones morales. Entonces, cuando el demonio no encontró más sentimientos nobles que robarle, la dejó; la dejó tirada, vacía de cualquier posibilidad de ser feliz para siempre. Ahora solo tendría pensamientos perturbadores.
Después del peor episodio de su vida; después de estar un mes internada en el hospital, con la mirada perdida y sin pronunciar palabra alguna; después, llego a su casa. La llevo un enfermero del hospital que se había enamorado de ella. Una vez sola, preparo café, agrego unas cucharadas de veneno para hormigas, y azúcar. Se sentó frente a la mesa y, llorando, bebió de la taza un buen sorbo. Su cara reflejaba toda su depresión, su tristeza que parecía no tener fin. Se sintió defraudada por un mundo al que nunca había querido aceptar. Y ya lo había decidido: no tenia sentido seguir viviendo un mundo que era tan cruel y brutal con un espíritu libre y sensible como ella.
Unos minutos después no pudo sostenerse más y cayo sobre la mesa esperando la muerte.
Fin.

sábado, junio 17, 2006

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Seré sincero: Iba a escribir algo sobre las razones por la cual nadie firma este blog, pero decistí argumentandome que sería aceptar las necesidades que a uno le impone la tecnología. El que se puedan hacer comentarios no significa que se deban hacer comentarios. Como el que se puedan usar emoticones, no significa que uno deba usar emoticones constantemente como si no se pudiera describir lo mismo con palabras.

El día de hoy, pongo una Aguafuerte porteña del estimado Roberto Arlt. Espero que la disfruten.


¿QUIERE SER USTED DIPUTADO?

Si usted quiere ser diputado, no hable en favor de las remolachas, del petróleo, del trigo, del impuesto a la renta; no hable de fidelidad a la Constitución, al país; no hable de defensa del obrero, del empleado y del niño. No; si usted quiere ser diputado, exclame por todas partes:
-Soy un ladrón, he robado... he robado todo lo que he podido y siempre.

ENTERNECIMIENTO

Así se expresa un aspirante a diputado en una novela de Octavio Mir­beau, El jardín de los suplicios.
Y si usted es aspirante a candidato a diputado, siga el consejo. Exclame por todas partes:
-He robado, he robado.
La gente se enternece frente a tanta sinceridad. Y ahora le explicaré. Todos los sinvergüenzas que aspiran a chuparle la sangre al país y a ven­derlo a empresas extranjeras, todos los sinvergüenzas del pasado, el pre­sente y el futuro, tuvieron la mala costumbre de hablar a la gente de su honestidad. Ellos "eran honestos". "Ellos aspiraban a desempeñar una administración honesta." Hablaron tanto de honestidad, que no había pulgada cuadrada en el suelo donde se quisiera escupir, que no se escu­piera de paso a la honestidad. Embaldosaron y empedraron a la ciudad de honestidad. La palabra honestidad ha estado y está en la boca de cual­quier atorrante que se para en el primer guardacantón y exclama que "el país necesita gente honesta". No hay prontuariado con antecedentes de fiscal de mesa y de subsecretario de comité que no hable de "honradez". En definitiva, sobre el país se ha desatado tal catarata de honestidad, que ya no se encuentra un solo pillo auténtico. No hay malandrino que alar­dee de serlo. No hay ladrón que se enorgullezca de su profesión. Y la gen­te, el público, harto de macanas, no quiere saber nada de conferencias. Ahora, yo que conozco un poco a nuestro público y a los que aspiran a ser candidatos a diputados, les propondré el siguiente discurso. Creo que sería de un éxito definitivo.

DISCURSO QUE TENDRIA EXITO

He aquí el texto del discurso:

"Señores: Aspiro a ser diputado, porque aspiro a robar en grande y a `aco­modarme' mejor.
"Mi finalidad no es salvar al país de la ruina en la que lo han hundi­do las anteriores administraciones de compinches sinvergüenzas; no, se­ñores, no es ese mi elemental propósito, sino que, íntima y ardorosamen­te, deseo contribuir al trabajo de saqueo con que se vacían las arcas del Estado, aspiración noble que ustedes tienen que comprender es la más intensa y efectiva que guarda el corazón de todo hombre que se presenta a candidato a diputado.
"Robar no es fácil, señores. Para robar se necesitan determinadas condiciones que creo no tienen mis rivales. Ante todo, se necesita ser un cínico perfecto, y yo lo soy, no lo duden, señores. En segundo término, se necesita ser un traidor, y yo también lo soy, señores. Saber venderse oportunamente, no desvergonzadamente, sino "evolutivamente". Me per­mito el lujo de inventar el término que será un sustitutivo de traición, so­bre todo necesario en estos tiempos en que vender el país al mejor postor es un trabajo arduo e ímprobo, porque tengo entendido, caballeros, que nuestra posición, es decir, la posición del país no encuentra postor ni por un plato de lentejas en el actual momento histórico y trascendental. Y créanme, señores, yo seré un ladrón, pero antes de vender el país por un plato de lentejas, créanlo..., prefiero ser honrado. Abarquen la magni­tud de mi sacrificio y se darán cuenta de que soy un perfecto candidato a diputado.
"Cierto es que quiero robar, pero ¿quién no quiere robar? Díganme ustedes quién es el desfachatado que en estos momentos de confusión no quiere robar. Si ese hombre honrado existe, yo me dejo crucificar. Mis camaradas también quieren robar, es cierto, pero no saben robar. Vende­rán al país por una bicoca, y eso es injusto. Yo venderé a mi patria, pero bien vendida. Ustedes saben que las arcas del Estado están enjutas, es de­cir, que no tienen un mal cobre para satisfacer la deuda externa; pues bien, yo remataré al país en cien mensualidades, de Ushuaia hasta el Chaco bo­liviano, y no sólo traficaré el Estado, sino que me acomodaré con comer­ciantes, con falsificadores de alimentos, con concesionarios; adquiriré ar­mas inofensivas para el Estado, lo cual es un medio más eficaz de evitar la guerra que teniendo armas de ofensiva efectiva, le regatearé el pienso al caballo del comisario y el bodrio al habitante de la cárcel, y carteles, impuestos a las moscas y a los perros, ladrillos y adoquines... ¡Lo que no robaré yo, señores! ¿Qué es lo que no robaré?, díganme ustedes. Y si ustedes son capaces de enumerarme una sola materia en la cual yo no sea capaz de robar, renuncio "ipso facto" a mi candidatura...
"Piénsenlo aunque sea un minuto, señores ciudadanos. Piénsenlo. Yo he robado. Soy un gran ladrón. Y si ustedes no creen en mi palabra, vayan al Departamento de Policía y consulten mi prontuario. Verán qué performance tengo. He sido detenido en averiguación de antecedentes co­mo treinta veces; por portación de armas -que no llevaba- otras tan­tas, luego me regeneré y desempeñé la tarea de grupí, rematador falluto, corredor, pequero, extorsionista, encubridor, agente de investigaciones, ayudante de pequero porque me exoneraron de investigaciones; fui luego agente judicial, presidente de comité parroquial, convencional, he vendi­do quinielas, he sido, a veces, padre de pobres y madre de huérfanas, tuve comercio y quebré, fui acusado de incendio intencional de otro bolichito que tuve... Señores, si no me creen, vayan al Departamen­to... verán ustedes que yo soy el único entre todos esos hipócritas que quieren salvar al país, el absolutamente único que puede rematar la última pulgada de tierra argentina... Incluso, me propongo vender el Congreso e instalar un conventillo o casa de departamento en el Pa­lacio de Justicia, porque si yo ando en libertad es que no hay justicia, señores..."
Con este discurso, la matan o lo eligen presidente de la República.

domingo, junio 11, 2006

Todo de golpe

Hay algo, una energía extraña, un ímpetu incontrolable que me hace escribir en este blog una y otra vez. Sé, al mismo tiempo, que tengo uno, quizás dos lectores que mantienen cierta asiduidad, y que no se mueren por leer lo último que escribí. Tampoco creo que lo que escribo le sirva a otro para identificarse. Sepan todos que las cosas que nos pasan son de lo mas comun del mundo. El planeta está lleno de gente que le pasa lo mismo que a uno. Con esto no estoy diciendo que haya que consolarse, pero como se suele creer que las cosas mas terribles le pasan solo a uno, saber que no se es el único sirve para no desviarse a la tragedia y concetrarse en el problema o en el asunto que sea. Yo estaba hablando de otra cosa al principio y, como de costumbre, me desvié a esto.
Hace ya varios dias que no puedo terminar de escribir un artículo sobre los volanteros. No me convence la forma en que lo hago, y eso me molesta. Escribo un párrafo un día, al otro lo corrijo, y cuando me dispongo a escribir más me doy cuenta que no me gusta lo anterior, lo borro y lo empiezo denuevo. Espero terminarlo antes de el viernes de esta semana que empieza, así por lo menos puedo continuar con otros textos que tengo en mente.

De ahora en más, acompañaré cada nueva entrada de este blog con un extracto de algun cuento o novela para realzar el interes que alguien pueda tener en este blog. (Todo por el rating)

Extracto del Libro “Crónicas del Angel Gris” de Alejandro Dolina

Historia del hombre que sabia que iba a morir un viernes


Los poderes del Angel Gris son muy limitados. Apenas si es capaz de humildes milagros de cuarta categoría. Por eso, cuando trata de favorecer a alguien, lo más probable es que lo reseque para todo el viaje. Una tarde, el Angel comunicó al farmacéutico Luciano B. Herrera que su muerte se produciría un día viernes.
Al principio, el sujeto aprovechó el dato con cierta astucia: arriesgaba la vida sin temores en sus días de inmortalidad, mientras que los viernes se encerraba bajo siete llaves.
Muy pronto el miedo comenzó a trastornarlo. Los domingos y los lunes mantenía una relativa calma. Los martes y los miércoles lloraba en silencio. Los jueves visitaba a sus amigos y parientes para despedirse de ellos. Los viernes enloquecía y suplicaba clemencia a los gritos. Los sábados se emborrachaba para festejar su buena suerte.
Las cosas fueron empeorando. Herrera tuvo que cerrar la farmacia, cayo en la miseria y adquirió una merecida reputación de chiflado.
Se suicido un martes, ante el beneplácito de quienes sostienen la doctrina del libre albedrío.
Los Refutadores de Leyendas pretenden demostrar la inexistencia del Angel Gris con esta historia, que apenas alcanza para demostrar su ineficacia.

sábado, junio 10, 2006

Plato del dia: ensalada de blog, el mundial y la escritura automática. (sin sazonar)

Como ven, cambié el formato del Blog, entre otras razones, porque el otro era horrendo. Ahora todo es mas claro y grandilocuente. Siento que aunque escriba cualquier boberia, al que lo lea le va a parecer polémico y audáz, y quien sabe si hasta tambien inteligente.

Empezó el mundial. Posiblemente el evento mas importante del mundo, incluso mas importante que las olimpíadas. Obejeto de pasiones y tensiones, que como debe ser, son totalmente desmedidas, mantiene en vilo a países enteros. Pocas cosas existen además del fútbol que se juega en el mundial. Ningun partido es poco importante todos tienen importancia decisiva.

No, no voy a escribir más del mundial. Voy a hacer escritura automática, cosa que nunca hice en una pc, es complicado no sé si sea del todo automática. Por empezar, cuando uno hace ese tipo de ejercicios no tiene tiempo para poner signos de puntuación. Si uno es lo suficientemente reprimido, leer lo que escribió durante ese momento catársico en el cuál se hizo el ejercicio, traerá, con seguridad, broncas y miedos hacia uno mismo. En la escritura automática parece como si la conciencia se sentara de brazos cruzados un rato a escuchar los reproches del inconciente, que parece ser siempre mucho más lúcido que uno. Despues, cuando la conciencia vuelve al mando se arma la podrida, pero no hay forma de revatir ninguno de los argumentos porque uno sabe que son ciertos, y eso es lo que da bronca o rabia, o lo que le de a cada uno. Despues de todo, tratar de ponerse en contra de uno mismo no tiene sentido. Mejor es ponerse al servicio de uno mismo, ver que se necesita para cambiar estas situaciones que nos angustian y ahora tenemos enfrente nuestro y nos lo muestra la mejor fuente.

Al final, mas que escritura automática, fue escritura espontánea alimentada de la libre asociacion. Seguramente Patroclo, y si tengo suerte algun otro lector ocacional de este blog me corrija sobre mis aceveraciones sobre el inconciente y la funcion de la esritura automática, la cual ya estoy harto de nombrar. Así que, sin mas ni mas, y sin releer todo esto porque seguramente lo terminaría corrigiendo hasta el punto de no estar deacuerdo con el texto, lo dejo a disposicion suya, mis lectores.

sábado, junio 03, 2006

Como para ir calentando la olla

Vuelvo a las andadas despues de todo este tiempo. En realidad, tuve mas andanzas durante el tiempo que no aparecí por este medio que nunca. Ahora con un poco mas de quietud emocional y física volverán a leerme en este blog.
Explicaré escuetamente que la version impresa de este blog-revista no saldrá más hasta que la situacion jurídica del dueño de la nueva imprenta que conseguí, despues del incidente marital con la hija del anterior, se clarifique y vuelva a su trabajo habitual.

Con sentido de esta Re-inaguracion, citaré un fragmento de la novela El Jugador, de Fedor Dostoievski. El mismo es un diálogo del protagonista, Alexei Ivanovich, y la mujer a quien ama, con la que tiene una relacion de dependencia absoluta. Elegí este y no otro fragmento porque cada vez que lo leo mis sentimientos se ven mas representados por esas palabras, esas declaraciones. Y recientemente he de comprobarlo con hechos.

- ¡Tonterías! En cualquier situación uno debe mantenerse condignidad. Si es preciso luchar, lejos de rebajar, la lucha ennoblece.

-Habla usted perfectamente. Y presume que yo no sé sostener midignidad. Es decir, que siendo digno,no sé mantener esta dignidad.¿Cree usted que puede ser así? Sí;todos los rusos somos así. Voy aexplicárselo: su naturaleza, demasiado ricamente dotada les impide encontrar rápidamente una forma adecuada. En estas cuestiones lo más importante es la forma. La mayoría de los rusos estamos tan ricamente dotados que nos es preciso el genio para descubrir una forma conveniente. Ahora bien,frecuentemente estamos faltos de genio, que es cosa rara en general. Entre los franceses y en algunos otros europeos la forma está tan bien fijada que se puede aliar a la peor bajez a una dignidad extraordinaria. He aquí por qué la forma tiene entre ellos tanta importancia. Un francés podrá soportar sin alterarse una grave ofensa moral, pero no tolerará en ningún caso un papirotazo en la nariz, pues esto constituye una infracción a los prejuicios tradicionales en materia de conveniencias sociales. Si los franceses gustan tanto a nuestras muchachas, es precisamente porque tienen unos modales tan señoriales. O más bien no. A mi juicio, la forma, la corrección, no desempeña aquí ningún papel, se trata simplemente del coq gaulois. Por otra parte, no puedo comprender esas cosas... porque no soy una mujer. Quizá los gallos tienen algo bueno... Pero, en resumen, estoy divagando y usted no me interrumpe. No tema interrumpirme cuando le hablo, pues quiero decirlo todo, todo, todo, y olvido los modales. Confieso, desde luego, que estoy desprovisto no sólo de forma sino también de méritos. Sepa que no me preocupan esas cosas. Estoy ahora como paralizado. Usted sabe la causa. No tengo ni una idea dentro de la cabeza. Desde hace mucho tiempo ignoro lo que pasa, tanto aquí como en Rusia. He atravesado Dresde sin fijarme en esa ciudad. Usted ya adivina lo que me preocupaba. Como no tengo esperanza alguna y soy un cero a sus ojos, hablo francamente. Usted está, sin embargo, presente en mi espíritu. ¿Qué me importa lo demás?¿Por qué y cómo yo la amo? Lo ignoro. Tal vez no sea usted hermosa.¡Figúrese que no sé si es usted hermosa, ni siquiera de cara! Tiene usted, seguramente, mal corazón y sus sentimientos es muy posibleque no sean muy nobles.

-Usted espera, tal vez, comprarme a fuerza de oro -dijo-, porque usted no cree en la nobleza de mis sentimientos.

- ¿Cuándo he pensado yo en comprarla con dinero? -exclamé.

-Con tanto hablar ha perdido usted el hilo del discurso. Intenta comprar mi cariño, ya que no a mí misma.

-No, no; usted no tiene nada que ver. Ya le dije a usted que me cuesta trabajo explicarme. Usted me aturde. No se enoje a causa de mi conversación. Usted comprende por qué no puede enfadarse conmigo. Estoy sencillamente loco. Por otra parte, su cólera me importaría muy poco. Me basta solamente imaginar, en mi pequeña habitación, el fru-fru de su vestido, y ya estoy dispuesto a morderme los puños. ¿Porqué se enfada usted conmigo? ¿Por el hecho de llamarme esclavo suyo? ¡Aprovéchese de mi esclavitud, aprovéchese! ¿No sabe usted que un día u otro la he de matar? No por celos o porque haya dejado de amarla, sino porque sí, la mataré sencillamente, porque tengo algunas veces deseos de devorarla. Usted se ríe...

-No me río lo más mínimo -dijo-. Y le ordeno que se calle inmediatamente.

-Sepa, además, que es peligroso que pasemos juntos. He experimentado
muchas veces deseos de pegarla,de desfigurarla, de estrangularla. ¿Cree usted que no me atrevería? Me hace usted perder la razón. ¿Imagina que temo el escándalo? ¿El enojo de usted? ¡Qué me importan a mí el escándalo y su enojo! La amo sin esperanza y sé que luego la amaría mucho más. Si la mato, tendré que matarme yo también. Pues bien, me mataré lo más tarde posible, a finde sentir lejos de usted ese dolor intolerable. ¿Quiere saber una cosa increíble? La amo cada día más, lo que es casi imposible. ¿Y despuésde esto quiere que no sea fatalista? Recuerde lo que le dije anteayer, en Schlangenberg, cuando me retó: "Diga una sola palabra y me arrojo al abismo." Si hubiese dicho esa palabra, me hubiera precipitado en él.¿Puede usted dudar de ello?

- ¡Qué estúpida charla! -exclamó.

-Estúpida o no, nada me importa. En su presencia tengo necesidad de hablar, de hablar sin tregua... y hablo. En su presencia pierdo todo amor propio y me da todo igual.